Análisis: «Fondos judiciales en bancarrota»
LECCIONES CONSTITUCIONALES
POR MARCO ANTONIO BAÑOS AVENDAÑO
ANÁLISIS: “FONDOS JUDICIALES EN BANCARROTA”.
Desde hace varios sexenios ya se venía denunciando que el “Fondo para la Administración de Justicia” que forma parte del Poder Judicial del Estado de Oaxaca, se encontraba en plena “bancarrota” por los abusos, corrupción y voracidad de quien o quienes lo administran.
El citado “Fondo para la administración de justicia”, fue diseñado para administrar el patrimonio del Poder Judicial, según el artículo 86 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de Oaxaca, que se integra por las pólizas de garantías en los procesos penales que Garantizan la libertad de los procesados, Garantías en la reparación del daño, cobros por derechos por copias certificadas, pagos en efectivo por pensiones alimenticias, recepciones de depósitos y valores a través de las tres cuentas bancarias de las instituciones bancarias BANAMEX, BANORTE y BANCOMER, por concepto de multas, rendimientos que bajo cualquier modalidad generen los depósitos en dinero o valores que amparen los certificados correspondientes a favor de ese consejo de la judicatura, toda esta enorme cantidad de rubros y de dinero comprende el citado “Fondo” del Poder Judicial del Estado de Oaxaca que hoy se encuentra en plena “bancarrota”.
Desde que se fundó el citado “Fondo” hace varios lustros, siempre ha prevalecido la opacidad y discrecionalidad en el manejo de estos cuantiosos recursos, no obstante que son públicos y debe prevalecer la Transparencia y Eficiencia en su manejo, por el contrario, se hizo una costumbre muy arraigada que éste “Fondo” pasó a ser manejado como una “caja chica” del Presidente del Tribunal en turno, cuyo manejo y disposición de esos recursos se hicieron en forma caprichosa y voraz, como lo citan los Jueces Jubilados.
En la administración del entonces Presidente Bolaños Cacho se acusó a este señor de dispendiar ese fondo para sufragar gastos de turismo académico y pasearse en distintos lugares del país y del extranjero para recibir grados académicos y medallas distintivas a su persona, sin ningún beneficio a favor de la justicia, mermando considerablemente ese fondo, empezando desde ese sexenio, su carrera vertiginosa hacia su desmantelamiento y bancarrota final.
El citado “fondo para la administración de la justicia” citan los Jueces Jubilados, lo administra directamente el Presidente del Tribunal Superior de Justicia, a través de un Director que el designa o propone ante el Consejo de la Judicatura, el cual manipula a través de los cuatro consejeros que son sus incondicionales. A pesar de que el artículo 89 de la ley Orgánica del Poder Judicial de Oaxaca disponga diversos requisitos para acceder a ese cargo, lo cierto es que ninguna persona accede a ese cargo, si no es por voluntad del Presidente, aunque no tenga esos requisitos, pero cuenta con su autorización para serlo.
Esta crisis de ese “fondo” se derivó por la falta de liquidez para sufragar la nómina del pago de las pensiones a los jueces y secretarios jubilados, que ya no aguantó más, y ya no alcanzó para cubrir la primer quincena de agosto de este año a esos jubilados. Por lo que el consejo de la judicatura a manera de cubrir esta insolvencia de pago, decidió sacrificar a esos jueces y secretarios jubilados, bajo el argumento de que fueron jubilados sin que hayan cumplido los años de jubilación que se exigía en esos años y en forma retroactiva ordenó sin tener facultades, el suspender el pago de esas jubilaciones.
No les importó a esos consejeros y a su Presidente que esos jueces y secretarios, ya les sirvieron por muchos años al Estado en la tarea de la administración de justicia, por si fuera poco en una reunión que tuvo el Presidente del Tribunal el día martes 8 de agosto en sus oficinas en la colonia reforma de esta ciudad con esos jueces y secretarios, ahí les dijo que realmente lo que motivó la suspensión de sus pagos, fue que el citado “fondo” ya esta “quebrado” que ya no tiene dinero, por eso decidió llevar este problema al consejo de la judicatura y éste determinó esa suspensión. Pero al ser increpado por esos jueces y secretarios jubilados, le dijeron que ésta no era una razón suficiente para haberlos suspendidos en sus pagos, el citado Presidente Alfredo Lagunas les dijo que el ya había recibido el “fondo” quebrado y con un gran déficit, y que le hicieran como le hicieran el ya no podía pagarles su jubilación.
Esto causó indignación entre esos jueces y secretarios, en cuya reunión le dijeron a ese Presidente que ese “fondo” fue llevado a la ruina por el mismo, al haber dispuesto de esos fondos en forma discrecional, porque no solamente se han suspendido el pago de esas jubilaciones, sino cualquier otro pago, por ejemplo, los certificados que amparan consignaciones, cuando se intentan cobrar se les argumenta a los justiciables muchos pretextos para su pago, el cual hasta esta fecha ya hay varias personas que le están reclamando a ese “fondo” el pago de las cantidades que amparan esos certificados, pero cuando se acercan a las ventanillas de eso fondo, simplemente no se pagan por falta de dinero o liquidez de ese “fondo de la administración de justicia” que esta en bancarrota.
Pero la quiebra de esos fondos judiciales derivan del dispendio, discrecionalidad y abuso con que se ha dispuesto de ellos, como pagos a asesores, secretarios privados, restaurantes de lujo, hoteles de cinco estrellas, regalos suntuosos, guardas espaldas, sobresueldos y otros gastos superfluos, hicieron que el fondo quedara en pasivos, y ya no alcanzara a cubrir la nómina de esos jueces y secretarios jubilados que son los primeros en ser sacrificados ante la voracidad de quien encabeza ese Poder Judicial, cuya designación no se debe precisamente a las urnas democráticas, sino a una componenda política contraria a los intereses de la justicia que tanto se propala.
El Tribunal Superior de Justicia ha gastado grandes cantidades de dinero en publicidad innecesaria a costa del fondo judicial en bancarrota, solamente para decir que Oaxaca es ejemplo de los juicios orales, ha pagado costosas conferencias con ponentes extranjeros, cuya presencia ocasionan gastos de honorarios elevados, hoteles de lujo, boletos de avión, solamente para que vengan a decirnos que los juicios orales son la salvación a nuestras desgracias. Bien harían las instancias gubernamentales de fiscalización y auditoria para que investiguen quien o quienes son los responsables de la quiebra de ese “fondo para la administración de la justicia”, y que se les finquen responsabilidades, por haber llevado a la “bancarrota” al fondo económico más importante del Poder Judicial de Oaxaca, cuyos números rojos han ocasionado que se les haya suspendido de sus pagos de sus jubilaciones a jueces y secretarios jubilados, que nada tienen que ver con esa “quiebra” fraudulenta, cuyos amparos de esos jueces y secretarios jubilados, se multiplicarán ante los juzgados de Distrito, para remediar a ese agravio.
El artículo 91º., de la actual Ley Orgánica del Poder Judicial de Oaxaca, dispone claramente que los recursos de ese fondo serán utilizados exclusivamente para el fortalecimiento en la administración de justicia. Este es el Gobierno que nos prometió un cambio, han pasado por alto el discurso de Don Benito Juárez, cuando dijo que “Los gobernantes en un sistema federativo, no pueden disponer de las rentas, ni gobernar a impulsos de una voluntad caprichosa”, ésta por verse si así será, la historia un día los juzgará.