Invitación a los rechazados de la UABJO… El amparo una opción de defensa

LECCIONES CONSTITUCIONALES

Por MARCO ANTONIO BAÑOS AVENDAÑO 

El pasado viernes 18 de julio apareció en la página web de la universidad autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca la lista de los aspirantes que fueron “aceptados” a las licenciaturas a esa casa máxima de estudios, pero la frustración y el coraje se apoderó inmediatamente de los más de 10 mil aspirantes que no fueron seleccionados en el proceso de selección de esa Universidad y el problema amenaza con salirse a las calles si es que no resultan seleccionados en la segunda oportunidad que se ha anunciado para este 26 de julio.

 

Dicho proceso de selección se encuentra impregnado de vicios e irregularidades y vacíos legales, ya que el único ordenamiento que sustenta a dicho procedimiento es a través del “Reglamento para el Ingreso, permanencia y Egreso de los Alumnos de esa Universidad”, el cual fue aprobado por el Consejo Universitario en los años 2006 y 2007, el cual adolece de serias deficiencias constitucionales, ya que ese Reglamento de ninguna forma, regula el procedimiento en específico para el ingreso de los aspirantes de esa Universidad, no obstante que la Ley Orgánica de esa Universidad de 1988, en su artículo 75ºo., último párrafo, dispone que la jurisdicción universitaria se sustenta en los principios de inocencia, audiencia, legalidad y demás de acuerdo con su naturaleza y atribuciones.

 

Luego en el artículo 4º., del citado Reglamento de ingreso, dispone que será la Universidad la que decidirá sobre los límites de crecimiento de su matrícula, de acuerdo a sus planes de desarrollo, criterios académicos, infraestructura física, presupuestos aprobados y recursos materiales y humanos disponibles.

 

Todo lo anterior significa que, la Universidad deberá de motivar conforme a Derecho esa negativa de acceso a la Universidad a todos los alumnos que rechace, justificando que no reunieron el puntaje mínimo para acceder a ese Centro de estudios, deberá de decirles por escrito, cuales son los límites para su matrícula en base a estudios previos y dictámenes, a su estructura física y a sus recursos disponibles, en fin, debe de emitir una serie de datos, estudios, cifras, etc., etc., para que les diga a los “rechazados” que no es posible admitirlos en su seno universitario.

 

Cosa que indudablemente no hará, porque nunca lo ha hecho, y nunca lo ha sido, porque en esa Universidad lo que priva es la anarquía y el abuso de poder, la arbitrariedad y la discrecionalidad son las reglas con que esos procesos de selección son manejados por las autoridades universitarias, por eso como ahora mandará a la calle a más de diez mil aspirantes que verán frustradas sus aspiraciones para estudiar a algunas de sus licenciaturas, principalmente medicina, derecho, contaduría, enfermería, entre otras.

 

Esto propiciará, que se genere un aumento en el mercado negro de la venta de ingresos a precios exorbitantes a través de personeros o de gente aprovechada que ha hecho de esta situación un negocio fabuloso, en la que se encuentran involucradas muchas de esas autoridades universitarias que ahora dicen que solamente ingresará a esa Universidad, quien apruebe el examen de admisión.

 

Por cierto un examen que deriva de un proceso irregular e ilegal, que adolece de muchas deficiencias, principalmente de aspectos constitucionales, por ejemplo, no existe en ese Reglamento un Comité de Académico de Evaluación de esos exámenes, no dice quien o quienes elaboran las preguntas, quien o quienes las califica, ni se dice cual es el puntaje para que un alumno sea admitido o rechazado, a parte de que el examen nunca le es enseñado al alumno que es “rechazado”, simplemente no aparece su código o clave en la lista de aspirantes admitidos o seleccionados.

 

La segunda oportunidad que se les brindará a los que ya fueron “rechazados” en el primer examen tuvo nuevamente un costo, entonces si es una segunda oportunidad, cabe preguntarse..¿Porque se les cobra de nueva cuenta, y no se les enseña los resultados de su examen…? Se insiste, este asunto es un negocio fabuloso para los que administran la Universidad pública, lucran con las aspiraciones de la juventud oaxaqueña, a propósito de la autonomía de esa Universidad y con la falta de reglamentación en ese espacio universitario.

 

Cuestión que sin lugar a dudas es un problema grave para los aspirantes frustrados a ingresar a esa Universidad, pero lo cierto, es que, hasta esta fecha nunca ha sido enjuiciado a ese proceso de selección, por iniciativa de los aspirantes “rechazados” a través del Juicio de Amparo, el cual constituye el único medio de defensa legal para abrir esos espacios universitarios que al parecer solamente es para “reservados”  o para “privilegiados”, o sea para aquellos que compraron el ingreso en el mercado negro o para quien buscó el padrinazgo de algún influyente en esa Universidad, pero de ninguna manera se puede pensar que por el hecho de que no haya aparecido el nombre del aspirante en la lista de admitido, se pueda pensar de que no se tienen las aptitudes o la capacidad académica para su ingreso, porque se insiste, nunca se les dirá porque “reprobaron” ese examen de ingreso. O a caso si lo harán…?

 

A todos los alumnos “rechazados” se les pide que no se dobleguen y que luchen por un espacio en esa Universidad, en esta Lección Constitucional, se les invita, a que actúen por los conductos legales, y el único medio legal se llama: Juicio de Amparo.

 

Cualquier abogado medianamente preparado les podrá explicar en que consiste esta valiosa herramienta que les será muy útil para que la autoridad judicial federal examine las deficiencias y fallas de ese proceso de selección y se les permita el acceso de inscripción inmediata a esa Universidad, no hay que olvidar que el Derecho a la Educación y a un proyecto de vida, constituyen un Derecho Fundamental tutelado en la Constitución y en los tratados internacionales, máxime cuando hay discrecionalidad monetaria de los que ‘pretenden aprobar y estudiar en la Universidad.

 

Por tanto, el Colegio de Amparo Dr. Ignacio Burgoa Orihuela A.C. le brindará el apoyo a aquel aspirante que quiera iniciar esa lucha judicial de acceso a esa Universidad, por mucho que les hayan dicho que no “aprobaron” ese examen colmado de irregularidades y de corruptelas cobradas en miles de pesos, hay solución jurídica por vía de Juicio de Amparo en lo econòmico, interesados acudan a Rufino Tamayo 800, Centro Oaxaca, teléfono 51 53414, 5159441.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *