«La mujer, el feminismo y el derecho»
LECCIONES CONSTITUCIONALES
Por MARCO ANTONIO BAÑOS AVENDAÑO
Mucho se ha señalado la subyugación de la mujer respecto del varón, los estereotipos tradicionales respecto de ellas, se han ido perdiendo, la mujer conservadora a fuerza de ser mandada por el hombre ha desaparecido gradualmente, la televisión utiliza un vocabulario que raya en la grosería, cuando se avizoran mujeres que trafican droga, tienen poder o usan al hombre como un objeto más de sus placeres.
La mujer tuvo que iniciar una batalla por sus derechos políticos, quebrantaron normas públicas y privadas, entre lo permitido y lo censurado para que, con esta participación han generado cambios radicales, han desafiado las jerarquías patriarcales, han permeado en la cultura, en ámbitos en donde jamás nos imaginamos que los espacios de desarrollo profesional los hubiesen hecho mejor que los varones.
La trascendencia que han marcado, las ha llevado a la vida pública, cambiaron las rígidas estructuras socioculturales, hay recelo de hombres por el posicionamiento de mujeres en el poder, ese llamado empoderamiento femenino, es un espacio nuevo de las mujeres, las libertades han cambiado respecto de la mujer, estudiosas, trabajadoras, mujeres realizadas en diferencia al hogar o matrimonio, son las que se suman a la nueva ola de mujeres que se emancipan y tienen una nueva mentalidad para ser mejores.
Hoy en día, muchas mujeres han cambiado las estructuras del poder patriarcal, reclaman a diario sus espacios, son maestras, trabajadoras, luchadoras sociales, feministas que recorren caminos en donde sus reclamos deben ser atendidos, desafían nuevos retos, su nueva reivindicación obedece a los derechos humanos que vienen siendo, un instrumento de poder para cambiar el estado de cosas.
Las luchas igualitarias siguen siendo espacios que las posicionan como luchadoras políticas, el derecho a decidir sobre su cuerpo, a luchar por su sexualidad, el derecho a una estricta equidad en el plano de la vida pública y privada, la lucha por ser mejores mujeres en la sociedad.
El feminismo inicia a finales de los años 60´s, la liberación de la mujer, su independencia, su activismo era limitado, el malestar sin nombre era que la mujer no tenía más derechos, hoy en día, son mujeres las que utilizan anticonceptivos, cuestionamientos sobre su sexualidad y su disfrute, las nuevas libertades han permitido que las mujeres tengan derechos sexuales protegidos y derechos humanos como mujeres que tienen derecho a diferir sobre lo que el hombre exige o decreta.
La forma de vida ha cambiado para la mujer, la desigualdad debe ser condenada por las instituciones y por la sociedad, no se le puede torturar, marcar su piel o tatuarla como un animal, no se le debe someter, tampoco se puede cometer violencia contra la mujer, tampoco se pueden limitar sus derechos político electorales, hoy la mujer ha triunfado en su lucha feminista, su emancipación para la igualdad con el hombre, será imposible si es confinada a lo domestico o privado.
La mujer debe ser lideresa, Rosario Castellanos no colocó a la mujer abnegada en la familia, sino hizo del machismo un discurso de la hipocresía, lo más armonioso es tener una sociedad igualitaria, equitativa y legitima.
El feminismo, es una lucha de reivindicaciones que demandan justicia social y luchando por la subsistencia diaria, les permite formar parte de la vida pública, hay temas que son propias de la mujer, la maternidad, la sexualidad, el aborto, madres solteras, reforzar las políticas del estado es su derecho.
Las mujeres no tienen espacios para señalar sus nuevos objetivos, los grupos, asociaciones civiles, las periodistas, las lideresas políticas, tienen espacios limitados en nuestro tiempo, ellas mismas deben generar pues, sus espacios, sus organizaciones, obligar a los partidos políticos incluso, no a la cuota del 50 y 50 por ciento, sino el derecho a tener su propio partido político, de mujeres comprometidas por México a dirigir todos los partidos políticos del país.
La desigualdad de hoy es falta de compromiso de los varones para con las mujeres, es hostigamiento, es censura, es tortura, es feminicidio, es limitar su participación política, es marginarla en un espacio de esclavitud, desigualdad es no darle la oportunidad para dirigir las grandes empresas o las representaciones políticas, sin embargo, el derecho a las libertades deben ser igualitarias, su naturaleza no es, sino la de una vocación de reafirmación y compromiso con el país.
Su gran determinación hoy señalará los rumbos, debemos revalorar el rumbo de Oaxaca con las mujeres, la igualdad de género es una de las más extraordinarias aportaciones al derecho y la cultura que las mismas mujeres hicieron en nuestra historia, debemos reconocer a todas las que han hecho grande el país, ellas marcarán la nueva vida social, la salud económica del país, cambiarán la política, señalarán los nuevos retos en la agenda nacional si se organizan y se empoderan en todas partes.
Oaxaca ha vivido un estado social de machismo en su política, en municipios se ha prohibido el voto femenino, se ha prohibido que la mujer sea presidenta municipal constitucional, se ha prohibido que sea la gestora de grandes causas y se ha hecho de la mujer un objeto de la política.
Por lo que toca a la mujer que ha cometido un crimen, debe ser tratada como un ser humano, los derechos humanos también son de la mujer, a ser respetada, a ser tratada como un ser humano, como también tiene derecho a ser feliz en nuestra sociedad contemporánea.
La mujer de hoy tiene que construir un espacio de libertades, de perfección en su actuar político, de belleza en su concepción de derechos elementales como ser humano.
La mujer de hoy necesita más Justicia, más seguridad jurídica, más igualdad, más poder para construir nuestra sociedad, más desarrollo y más participación política, mejores condiciones de vida, menos discriminación y mejor trato en nuestra sociedad, por tanto, su lucha no ha terminado, unamos nuestros esfuerzos para que cada día logremos sus objetivos, una sociedad mejor y nuevas esperanzas de progreso.