«Deportación masiva» Marco Antonio Baños A.

Oaxaca, Oax. 25 de febrero de 2017.

LECCIONES CONSTITUCIONALES

Por Marco Antonio Baños Avendaño

Estados Unidos de Norte América, en su actividad de deportación en 2016 fueron repatriados 219 mil 932 mexicanos, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos emitió pautas aún pendientes para una detención y deportación más agresiva de inmigrantes, así como de seguridad fronteriza, las políticas cada vez más agresivas contra los mexicanos, han podido ser constatadas por las mismas personas que han sido deportadas, el Instituto Nacional de Migración, como la Secretaría de Gobernación deberían aplicar la misma medida de aplicación de las leyes migratorias a los “gringos”, a los norteamericanos perniciosos que vienen a México a buscar refugio después de haber cometido algún delito.

No se sabe al momento, ¿Cuántos extranjeros, específicamente norteamericanos están viviendo en México, o cuántos norteamericanos tienen propiedades privadas empresas, industrias en nuestro país?, ¿Cuántos Norteamericanos o extranjeros existen en nuestras cárceles mexicanas?, ¿Por qué no sabemos ese registro en los Estados de la República para saber si son criminales, terroristas o realizan trata de blancas, o secuestran o venden o trafican drogas u órganos humanos? Esto, simplemente no se sabe a ciencia cierta en México.

Lo cierto es que los mexicanos no hemos sido racistas o xenófobos con los gringos, tampoco somos gente que trata mal a los extranjeros, los dejamos ser simplemente, ellos recorren nuestras calles de Oaxaca, de muchos Estados de la República, consumimos sus productos, sus marcas comerciales, sus insumos, hemos fortalecido su economía a costa de la neo-esclavitud de nuestros connacionales trabajando sus tierras y sus empresas.

¿Qué pasaría si los tratásemos igual en nuestro territorio nacional?, ¿ Que pasaría si fuésemos racistas con ellos? ¿Qué pasaría si los despreciáramos públicamente como lo hacen ellos a los mexicanos que viven en ese país?.

¿Porque hemos sido tan condescendientes con los gringos, cuando ellos son esclavistas con nuestros connacionales? Debe ya existir una desobediencia civil en cuanto a no consumir lo que es de los extranjeros, no consumir sus aguas negras embotelladas o sus comidas hechizas que no tienen nutrientes como nuestras verduras.

Lo cierto es que nuestra economía debe avanzar, debe producir, es un reto económico hacer producir el campo mexicano, es un reto financiar e incentivar el agro mexicano para poder producir para conseguir nuestra soberanía alimentaria que hace falta también ser regulada en nuestra Constitución Federal.

Hoy en día familias enteras son disgregadas por las deportaciones que ya son más cruentas, en donde los norteamericanos han separado a quienes producen excedentes de producción en Estados Unidos, deportando a miles de connacionales, recordemos que muchas familias mexicanas también viven de las remesas económicas que mandan del extranjero a México para vivir.

Cuando el Honorable Congreso de la Unión se atreva junto al Senado de la República hacer extraterritoriales nuestros derechos constitucionales,  en materia de defender los Derechos Humanos de nuestros connacionales en suelo extranjero y hacer proteccionista y extraterritorial hasta nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos creando mecanismos de protección y defensa de Derechos Humanos, así como los norteamericanos defienden a sus ciudadanos, entonces habrá una debida protección a los migrantes e inmigrantes, mientras tanto habrá violaciones a derechos humanos en lo que resta de nuestras vidas.

Los Chinos, los Norteamericanos y los Norcoreanos, tienen una Constitución extraterritorial, es decir, a ellos si los protege su constitución política fuera de su propio territorio nacional.

Ningún estado de la República Mexicana está preparado para una deportación masiva de migrantes, lo cierto es que no hay  fuentes de trabajo digno y bien remunerado, no hay empleos fijos o de base, no hay condiciones de progreso laboral, no existen más que subempleos para una gran cantidad de trabajadores y trabajadoras que ya son deportados de la Unión Americana.

El Tratado Trilateral de Libre Comercio, es una ficción jurídica, un sueño de empresarios, no protege a nadie que no sea industrial o empresario, finalmente fue  una falacia, un engaño, las políticas anti inmigrante de los Estados Unidos, no son del todo bien aceptadas, por eso el recrudecimiento del Señor Trump para con los mexicanos.

Se debería actuar, pidiendo papeles migratorios a los norteamericanos que viven en México, o en su caso también deportarlos, la igualdad de los estados nacionales, no se ve en la práctica, debiésemos tratarlos con igualdad, mucho menos se visualiza la defensa de nuestros connacionales en nuestro territorio, en auxilio a quienes dejaron familia, bienes, posesiones, objetos de valor o comercios establecidos y que forzadamente los deportaron de territorio gringo al nuestro.

De la misma manera que se identificará e “interceptará” a las personas que el Departamento de Seguridad Interior de los E.U. se sospeche que colaboran con organizaciones criminales y se le prohibirá obtener una visa, lo mismo se debería hacer con los criminales extranjeros que ingresan a territorio nacional.

Lo cierto es que hoy en día se está deportando a toda persona que no tenga papeles o este documentado o bien, haya cometido delitos relacionados con el crimen organizado trasnacional. México ya debería aliarse con Latinoamérica y Europa olvidando el sueño americano.

La deportación masiva que se está realizando, aunado al sentimiento de racismo imperante de quienes ejercen la autoridad o la misma policía de los diferentes Departamentos Norteamericanos, ahora tienen un control que raya en el descontrol político, los antiinmigrantes deberían organizarse, se afectan millones de vidas, se deja de producir como antes, a los gringos la mano de obra barata les atrae empresarialmente, a nuestros Mexicanos nos resta pensar que debemos alcanzar un grado más de dignidad y tener que regresar a nuestra patria, olvidando todo por lo cual se luchó en suelo extranjero, por lo que a muchos no les pesará la idea del suicidio.