«Venganza privada en Oaxaca»

LECCIONES CONSTITUCIONALES

MARCO ANTONIO BAÑOS AVENDAÑO

“VENGANZA PRIVADA EN OAXACA”

En Oaxaca, ya no existe Garantismo en la Defensa de los Derechos Humanos, no hay condiciones de saberse seguro en las Calles, en las Poblaciones, no hay Seguridad Pública garantizada por el Estado,  la Defensoría de Derechos Humanos en lugar de condenar actos de violación a derechos humanos, debiese mejor fortalecer los mismos Derechos Humanos en las Escuelas, prevenir más que lamentar situaciones de Venganza Privada, ejecutando acciones de justicia pronta y por propia mano de los particulares, que ya son actos diarios, que van creciendo poco a poco en nuestra Entidad, hasta tornarse una situación de legítima justicia.

Las Agencias Estatales de Investigaciones, realizan su trabajo al margen de la prevención de los delitos, no hay fortalecimiento de la prevención del delito, menos conocimiento generalizado de los Derechos Humanos en Oaxaca.

Los últimos acontecimientos dados en varios lugares de nuestro Estado, indican que los Derechos Humanos NO existen, las turbas mandan sobre los aparatos de administración y procuración de Justicia, los padres de familia, los ciudadanos, los vecinos organizados, ahora ya pueden hacer Justicia por su propia mano, ante la incapacidad de las autoridades de acudir a la detención inmediata de violadores, ladrones o delincuentes.

 Debiesen existir campañas de prevención del delito, las Fiscalías están lejanas al pueblo, mucho más los Jueces o Magistrados en la comodidad de un estado de confort, en el que no han salido a la luz, al menos para robustecer la imagen de los Derechos Humanos.

Se escucha diariamente de atados a postes, de encuerados que hacen pasear en las calles, de detenidos y golpeados salvajemente por una turba violenta, ante la incapacidad de autoridades que no atienden la prevención sino la consecuencia de delitos que día a día van en crecimiento constante.

Ya podemos hacer registros diarios de intentos de linchamientos, ante el alto índice de inseguridad y la falta de confianza en las autoridades, que no han tomado su papel como corresponde en Oaxaca.

El Congreso del Estado debe llamar a rendir cuentas sobre linchamientos a la Defensoría de los derechos Humanos, sobre el porqué no ha actuado en la prevención del delito, la capacitación constante y la defensa de derechos humanos en Oaxaca.

Así mismo, hacer conciencia de estos derechos a la población en general, es muy común escuchar en nuestras calles “…Nadie hace nada por defender los derechos humanos, y cuando entregan a un delincuente a las autoridades, éste sale libre, por lo que han decidido hacerse justicia por su propia mano…”

Este fenómeno se ha presentado, principalmente, en los municipios conurbados y con mayor cantidad de pobladores. Las corporaciones policiacas han sido rebasadas por grupos delincuenciales.

En otros Estados de la República ya se han matado ladrones, las personas usan pistolas u otras armas de fuego, hay ya un  gran porcentaje de los casos de intentos de linchamientos se vincula de manera directa el delito de robo, seguido por el atropellamiento o incidentes viales, además de violaciones, abuso policial, homicidios y secuestros.

Existen mensajes en las calles como “…Ratero te estamos vigilando”, “Si te sorprendemos, te vamos a colgar o a quemar”, “Olas autoridades no mandan, nosotros sí”, “Ratero: aquí te puedes morir, aquí no robes”, en las calles lee en mantas o carteles: “Si te sorprendemos robando, te vamos a linchar, a colgar o quemar”. Pero la advertencia no ha detenido a los delincuentes.

El avance de la delincuencia es creciente, cada día más Oaxaca experimenta esta falta de valores, falta de capacitación en materia de Justicia y lo que representa, falta de seguridad pública que debiese estar garantizada por el estado, aunado a la falta de respuesta de las autoridades, dan margen para que aumente más el número de linchamientos.

Existe ineficiencia de las Policías para intervenir decididamente, por falta de capacitación a las autoridades sobre Derechos Humanos, existe hartazgo ciudadano, por la omisión de las autoridades de no dar respuesta inmediata a los ciudadanos en casos urgentes.

Existe falta de credibilidad de las instituciones gubernamentales, policiales, de Derechos Humanos, de Justicia local, la única salida es  el uso de la violencia como una solución pronta y eficaz.

La sin razón existe ya en nuestro lastimado Estado de Oaxaca, no bastan declaraciones de “Defensores de Derechos Humanos”, hay que culturizar a todos los sectores de la población en general, prevenir todos los riesgos es prevenir y dar soluciones inmediatas a una sociedad que ya sufre por ignorancia, recurrir a la Venganza Privada.

Si hay linchamientos públicos, es por no existir educación en materia de Derechos Humanos, la impotencia social, la falta de compromiso de la autoridad, la falta de certeza para actuar en lo inmediato, la contemplación de las autoridades para que la venganza privada se manifieste día a día, el dolor y el miedo social que se refleja en la falta de seguridad pública, que se ha traducido en que en Oaxaca la gente se haga justicia por su propia mano, es muy lamentable, sin embargo, esta falta de confianza en las autoridades, de saberse mal protegido por las policías, es parte de la gran descomposición social, es parte de un Oaxaca fallido en materia de Seguridad Pública, el discurso de la gran  desesperación de la población al no recibir del Estado mexicano la seguridad y la impartición de justicia que necesitan sus comunidades es ya una realidad en nuestro Estado de Oaxaca.

El Estado es responsable de todo linchamiento público, por no dar seguridad pública a la población, eficiente, eficaz, responsable, garantista de derechos humanos, no hay capacidades reales en esta materia. O el Estado garantiza la Seguridad Pública o surgirán grupos de autodefensa con el ideal de la “Venganza Privada” bajo su responsabilidad.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *